El molino Grollmus (1928) es central eléctrica, aserradero, taller, lagar, pulpería, molino harinero, forja, torno... en una máquina gigantesca de madera que funciona con la precisión de un reloj a lo largo de un eje motriz. Un mecanismo habitado construido por un autodidacta de origen alemán.
¿Sigue funcionando?
ResponderEliminarLo digo porque dices "es central eléctrica..."
Tiene aspecto de abandonado, pero quizá sea por las fotos, en blanco y negro.
Hace poco visité la Fábrica de Harina, en Medina de Rioseco.
Como no lo había hecho ningún genio alemán, sólo servía como molino...
Pero qué molino: quince metros de salto de agua, y daba para meter el grano por un lado, y sacar la harina por el otro. Dos únicas personas para todo el proceso; como siempre, el jefe, vigilando y echando cuentas, y el Currito de la Cruz (también llamado Currante del Meridiano), trabajando.
..Me pareció fascinante.
Debió abrirse por los mismos años que la tuya, y fue cerrada ya en los años sesenta...
La máquina de coser, para cerrar los costales, hermana gemela de la que tu muestras...
Algún día te mandaré las fotos. Nada que ver con las tuyas, pues se me da mal el tema.
me parece fantástico ver las fotos ya que tuve el gusto de conocerlo ´
ResponderEliminarpersonal mente, es igual como lo contaba mi abuelo Máximo Grollmus en sus
relatos.
Ana Bastias Grollmus